Al mirar hacia atrás y fijarme en los resultados de mi vida, realmente creo haber tomado demasiadas decisiones equivocadas, tantas que puedo perder la cuenta de las mismas, pero creo que, el conjunto de todas estas decisiones equivocadas, me han llevado a vivir una vida plena.
Tal vez no tenga el dinero ni la fama ni la fortuna que esperaba tener, tal vez no tenga la calidad de vida que algunos de mis compañeros tienen actualmente y tal vez a mis cuarenta años no tengo aun mi vida arreglada o peor aún solidos cimientos sobre los cuales edificar mi segunda y posiblemte mi tercera edad, pero, ¡¡¡ rayos !!! Tengo un hogar al cual regresar cada noche, tengo un trabajo que me permite vivir decentemente, tengo comida para llevarme a la boca y llevarla a mi familia, ¡¡¡ tengo una familia hermosa !!! Tengo amigos… muchos amigos y tengo varios blogs que son como hijos virtuales… tengo tantas ideas y tantos planes y tantos proyectos, que no me alcanzarían tres vidas para completarlos. Por eso agradezco, no todos los días, pero cada vez que lo recuerdo, agradezco a Dios, al ser infinito, al Gran Arquitecto del Universo por mi vida y por las bendiciones que tengo.
Tal vez no tenga el dinero ni la fama ni la fortuna que esperaba tener, tal vez no tenga la calidad de vida que algunos de mis compañeros tienen actualmente y tal vez a mis cuarenta años no tengo aun mi vida arreglada o peor aún solidos cimientos sobre los cuales edificar mi segunda y posiblemte mi tercera edad, pero, ¡¡¡ rayos !!! Tengo un hogar al cual regresar cada noche, tengo un trabajo que me permite vivir decentemente, tengo comida para llevarme a la boca y llevarla a mi familia, ¡¡¡ tengo una familia hermosa !!! Tengo amigos… muchos amigos y tengo varios blogs que son como hijos virtuales… tengo tantas ideas y tantos planes y tantos proyectos, que no me alcanzarían tres vidas para completarlos. Por eso agradezco, no todos los días, pero cada vez que lo recuerdo, agradezco a Dios, al ser infinito, al Gran Arquitecto del Universo por mi vida y por las bendiciones que tengo.
Los primeros recuerdos que aparecen claros en mi memoria se remontan a la época en la que tenía tres o cuatro años… no recuerdo más allá de aquello. En ocasiones he visto antiguas y amarillentas fotos de mis otras edades… de las edades más infantiles y uno que otro recuerdo aflora, como aquella vez en que con mi familia veíamos desde el cerro en el que estaba enclavada mi casa, hacia el cerro del frente, en el cual estaban construyendo lo que a la postre sería la Autopista General Rumiñahui… y muy poco recuerdo de eso… las imágenes que tengo en la cabeza son igual de amarillentas que las fotografías y, me pregunto ¿serán solo los recuerdos los amarillentos o en realidad el sol brillaba más cuando yo era pequeño? ¿será el efecto de los años en las fotografías o en realidad los setentas tuvieron una tonalidad pastel?
Otro recuerdo que viene aparejado de una fotografía es un viaje a San Pablo del lago, en aquella época los viajes eran realmente largos, y llegar a San Pablo tomaba al menos unas 3 horas, o al menos así me parecían a mí. El recuerdo tiene que ver con los sentidos, el frio que hacía en el lago obligaba a que yo me encuentre cubierto hasta la capucha con un saco azul… azul marino, de lana, con un sello marinero, de esos que pican un poco, las orejas frias, cubiertas con la capucha… y hasta ahí el recuerdo.
Yo nací a inicios del año 1969 lo cual significa que soy producto de una noche de pasión de mis padres en pleno mes de abril, se puede decir que soy consecuencia de la primavera. La historia de mis padres, algún día la contaré, sepan ustedes solamente que nací en el mes de enero, soy el tercer hijo de mi madre y el primer hijo de mi padre y, por las circunstancias en las que fui concebido y nací, me quedé a cargo de mis abuela y mis tíos, mientras mi abuelo y mis padres trataban de hacerse una nueva vida en los Estados Unidos.
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